En cuestión de 48 horas, tres dirigentes del Frente Amplio afirmaron con contundencia que en Venezuela hay una dictadura.

Estos dirigentes, al igual que muchos otros, han venido siendo interrogados desde hace meses por la prensa en relación a este tema, y en sus respuestas siempre han dicho que en Venezuela existe una violación de los derechos humanos, pero hasta el momento nunca habían calificado al gobierno de Nicolás Maduro como de corte dictatorial.

El primero en hacerlo fue el ministro de Economía, Danilo Astori. “Lo de Venezuela es una dictadura, y es una dictadura tremenda”, dijo al programa Fácil Desviarse de FM del Sol.

A estas declaraciones se sumaron al día siguiente las del expresidente José Mujica y las del candidato presidencial por el Frente Amplio, Daniel Martínez.

Mujica expresó a Radio Universal: «Es una dictadura, sí. Y en la situación que está no hay otra cosa que dictadura”.

 Daniel Martínez se pronunció a través de su cuenta de Twitter y dijo: “El informe de Bachelet es lapidario respecto a Venezuela y se trata de una dictadura”.

El tuit agrega: “Si, compañero Danilo, para la izquierda el tema de los derechos humanos debe ser siempre un imperativo ético.  Hay que seguir trabajando en una salida negociada y que el centro sean los venezolanos”.

Quien se mostró molesto por esta decisión tomada por los dirigentes frenteamplistas fue el dirigente del Sunca y exprecandidato a la Presidencia, Oscar Andrade que escribió en Facebook:

“Elegir las redes sociales o los medios para anunciar virajes en temas sensibles es por lo menos irresponsable. Inaugura una forma que nos termina lastimando de forma innecesaria  Vendrá ahora, imagino, el debate en el Frente Amplio, ya condicionado por las declaraciones públicas. ¿A santo de qué la urgencia? Día amargo, celebran los poderosos”.

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